Regímenes escópicos: de la imagen tradicional a la e-image
La semana pasada con la presentación fundamentalmente a cargo de Alejandro Piscitelli hemos cerrado aquí en teóricos la primera unidad, dedicada a revisar perspectivas de abordajes de nuevos medios, y la idea de la clase de hoy es dar comienzo a la segunda unidad, a la que hemos dado por nombre “cultura visual”. Y en la segunda parte de la clase vamos a presentar el trabajo práctico que llevaremos a cabo hasta el final del cuatrimestre.
Dado que el programa del cuatrimestre está pensado en función de una plataforma eminentemente visual, nos parece necesario revisar algunas perspectivas que estudien las imágenes y su profundo impacto en la cultura contemporánea, sin dar por sentada la importancia de la producción cultural visual y audiovisual, sino revisándola y tratando de comprender si con YT y el resto de las redes sociales se instauran nuevos modos de mirar, y qué características tendrían estos nuevos modos.
Pero esta última frase la digo para desdecirla inmediatamente. Ya que precisamente al hablar de “impactos”, por ejemplo “el impacto de las tecnologías en la vida cotidiana”, “el impacto de la imagen en la cultura”, y otros “impactos”, estamos separando los términos. Como si las tecnologías o las imágenes no fueran parte de la vida cotidiana y de la cultura. Como si los usos tecnológicos no fueran construidos por los usos que les dan sus usuarios en la vida cotidiana, o como si las imágenes fueran neutras, y no producto mismo de la cultura en la que se producen, circulan, reciben las mismas. Y podemos ir más allá: no sólo las imágenes se construyen histórica y socialmente, sino y aquí viene lo que esperamos sea el aporte de la clase de hoy, que “los modos de ver”, las percepciones de nuestro ojo sobre las imágenes también varían de acuerdo a las reglas de producción y recepción de imágenes de una época. A este conjunto de reglas, José Luis Brea lo llama “régimen escópico”, donde como ustedes sabrán, régimen significa regla, en el sentido de norma, y escópico, sería en nombre que damos al acto de mirar. En verdad el término es preexistente a Brea, y ha sido previamente trabajado por Christian Metz y Martin Jay .
“Suele decirse que la era moderna ha estado dominada por el sentido de la vista de un modo que la aleja de sus predecesores premodernos y, posiblemente, de sus sucesores posmodernos. Dando comienzo con el Renacimiento y con la revolución científica, la modernidad ha sido considerada, por lo general, simple y resolutivamente ocularcéntrica.”
Martín Jay: Regímenes escópicos de la modernidad.
Entonces, nuestra pregunta sería: ¿qué caracteriza al régimen escópico de los nuevos medios, en qué se distingue de regímenes escópicos anteriores? ¿Podemos hablar de solamente un régimen escópico o habría más de uno en tensión o en convivencia?
Aclaramos que cuando hablamos de régimen escópico no hablamos de las imágenes en sí mismas, sino de los modos de mirarlas. No vemos las imágenes de la misma manera siempre, sino que lo hacemos condicionados por el contexto, las estéticas dominantes de una época, las creencias, los dispositivos técnicos, los usos sociales de las imágenes. Cada época histórica tiene un régimen escópico dominante, o tal vez más de uno en tensión o convivencia. Observemos por ejemplo esta Hagaddá de Pesaj. Como sabrán, la hagaddah es un libro donde se cuenta el éxodo de los judíos de Egipto y su peregrinación por el desierto. Las de esta imagen fueron realizadas durante la Edad Media.
Fíjense que la estética es completamente románica en un caso, islámica en otro. Las pirámides se representan como construcciones góticas. Con mi familia mirábamos hace poco estas imágenes y mi esposo me decía: pero estos personajes no se parecen a los yehudim, y el emperador egipcio parece uno europeo… y Moisés parece el Papa! Los lectores de la Edad Media, podían darse cuenta de esas diferencias? Seguramente no, porque la única estética que ellos conocían era la románica medieval…
Pero hay un cuadro que, pintado en 1656, atraviesa todos los regímenes escópicos de la modernidad a la actualidad. Y ese cuadro es Las Meninas, de Diego de Velazquez. Desde el régimen escópico de la actualidad, sería ciertamente una selfie: una imagen donde está incluido aquél que la toma. Desde el de la modernidad, sería un ejemplo perfecto de perspectiva, toda vez que los ojos se concentran en el punto de fuga, el brazo del mayordomo de la Reina, la figura que aparece en el fondo del cuadro. En las sucesivas reversiones del siglo XX, que se ven en la presentación, por ejemplo las de Picasso, Dalí, Hamilton y otros, se pone de manifiesto el régimen escópico del “inconciente óptico”, que a partir de la imagen móvil del cine se pone de manifiesto a lo largo del siglo XX.
Regímenes escópicos de la modernidad.
Martin Jay llama “perspectivismo cartesiano” al régimen escópico de la modernidad:
“Me gustaría comenzar por volverme hacia lo que, por lo general, se reconoce como el modelo visual dominante, incluso completamente hegemónico, de la era moderna, aquel que podemos identificar con las nociones de la perspectiva en las artes visuales del Renacimiento y con las ideas cartesianas de la racionalidad subjetiva en la filosofía. Por conveniencia, puede denominarse perspectivismo cartesiano. “
Siguiendo el razonamiento de Jay, en otros trabajos José María Brea identifica tres eras de la imagen: la imagen-materia, el film, la e-image. Cada una de ellas, con un régimen escópico diferente.El régimen escópico de la imagen materia es el correspondiente a la de la imagen fija de las artes plásticas. En él, la imagen es indisociable a la materialidad de su soporte, y su registro en él opera como una memoria de registro, una memoria de escritura o ROM. La imagen film, en cambio, ya no será una imagen-materia, sino una imagen-fantasma. Su lazo con el soporte es realmente débil y la imagen-film no es una imagen material, sino una construcción mental. Su registro se parece a un “libro de arena”: se imprime pero inmediatamente se borra. Por otro lado, ya Benjamin en “La obra de arte en la era de la reproductibilidad técnica” había observado que hay una disociación entre lo que percibe la cámara de filmar y lo que percibe el ojo. La cámara percibe fenómenos que el ojo no, sin ir más lejos, el ojo percibe movimiento donde la cámara percibe veinticuatro cuadros por segundo. A esa percepción del dispositivo, Benjamin la llamó “inconciente óptico”. Pero Brea va un poco más allá, y considera que se puede ampliar el concepto de inconciente óptico a las actividades exploratorias del arte del siglo XX, que en un acto de desocultación, es el encargado de traer a la conciencia algo que en lo que vemos nos aparece vedado, oculto. De esta manera se hacen visibles las relaciones entre el conciente y el inconciente, se ponen en juego relaciones entre elementos que aparentemente se encuentran alejados en lo conciente pero asociados en el inconciente. Tales operaciones se pueden ver en las versiones (remixes?) del siglo XX del cuadro de Velazquez, que por otro lado proponen una distribución del contenido en varios soportes. Hay que ver que, pintadas en 1957, la serie de Las Meninas de Picasso se compone de cincuenta y ocho cuadros.
Para Brea, entonces
“el arte es una actividad inscripta en cierto régimen escópico, que afecta a los actos de ver” .
Como es de esperar, para el autor se producen cambios fundamentales en el régimen escópico de nuestro tiempo , a partir del creciente asentamiento de la imagen electrónica, o e-image. Ésta presenta, en primer lugar, una gran diferencia respecto del tipo de disposición-memoria de los regímenes escópicos anteriores. Si la memoria de la imagen tradicional era de tipo archivística, exteriorizando un contenido que podría ser recuperado en el futuro, la memoria de imagen electrónica altera la flecha del tiempo: no vuelve hacia el pasado, sino que se extiende hacia el futuro. Su función no es de archivo, sino de proceso, su función no es recuperar sino producir. Una memoria de corto plazo, volátil. Una memoria RAM que no obstante conserva algunos rasgos del tipo de memoria inconciente de la imagen fílmica en su carácter fantasmal y de débil conexión con el real. Esta nueva forma de memoria, dice Brea, afectará tanto a las nuevas formas de economía capitalista como a su distribución social. La imagen se volverá parte del sistema productivo, y no al margen, y poseerá un alto valor de sociabilidad, gregario, siendo utilizada como parte del intercambio afectivo entre personas.
Dice Brea
“El imaginario de las redes informacionales posee enorme fuerza sobre las formaciones del imaginario, condicionando los modos y las fantasías de los propios sujetos”
“La imagen electrónica se convertirá entonces en una expresión de afección mutua a partir del intercambio de imágenes, repercutiendo ésta en el orden conductual de los comportamientos recíprocos”.
El arte de la era de la e-image explorará también estas nuevas características. Esto lo podemos ver en los dos siguientes videos. El primero, una obra del 2009, Flashings in the mirror, de Jasper Ellings es una compilación de selfies donde el flash contra el espejo constituye el principio organizador de la imagen, al igual que en Las Meninas lo era el punto de fuga.
flashings in the mirror from jasperelings.info on Vimeo.
El segundo, un recorte de la performance “El artista está presente” de una artista serbia , Marina Abramovic, en el MOMA de Nueva York trabajada sobre la mirada del público hacia ella misma. Con ese video emocionante, nos despedimos hasta la próxima clase, donde continuaremos con el texto de Jenkins: Adoración en el altar de la convergencia.
Hacia el trabajo final
En la segunda parte del teórico estuvimos junto a Valentín Muro haciendo algunas conjeturas para plantear una pregunta de investigación para el trabajo práctico. Si bien no dimos ejemplos de preguntas, aconsejamos tener en cuenta algunos principios:
Quedó claro que el trabajo constará de una lectura distante de YT. (En ese sentido, aclaramos que no se puede trabajar con un solo video, por ejemplo, produciéndolo, subiéndolo y midiendo su audiencia. Precisamente este no es un trabajo de lectura distante sino de lectura cercana).
Todo tema nace de una relación entre partes. Por ejemplo, se puede vincular un tema de interés con su abordaje en YT por parte de productores de contenidos, distribuidores, o distintos tipos de audiencias.
Al elegir un tema de trabajo, es muy importante que tengan un genuino interés en él, sea personal o del ámbito de la comunicación. Pasarán mucho tiempo con él y necesitaremos de todos los recursos posibles para poder realizar interpretaciones, por lo tanto sería bueno tener cierto conocimiento anterior sobre el mismo.
Pueden optar también por construir la pregunta entrando desde algún valor de YT que les interese investigar, por ejemplo videorespuestas, comentarios, audiencias.
Otras entradas posibles: desde la estética de la imagen electrónica, el remix y el mashup, las relaciones entre tv y audiencias aplicadas a una temática específica. Todas estas temáticas pueden a su vez relacionarse con otras variables, internas a la plataforma, inherentes a los usuarios, temporales o locales.
Lo cierto es que el abordaje desde una lectura distante nos lleva a tener que realizar una búsqueda y una sistematización de una cierta cantidad de videos, no de unos pocos, a fines de luego poder encontrar recurrencias y patrones para realizar interpretaciones.
En la próxima clase, junto a Valentín, trabajaremos con búsquedas de información y construcción de base de datos. Los esperamos.
Comentarios
InterLink Headline News 2.0 — Interlink Headline News Nº 7037 del Domingo 11 de Mayo de 2014
[…] EDITORIAL DEL INCONSCIENTE ÓPTICO A LA E-IMAGE Editora invitada Gabriela Sued Post original […]
Patricia Di Ciano_ C14
Muy interesante encontrar en Las Meninas lo que podríamos llamar la primera huella de una Selfie.
gabriela martinez
El ejemplo utilizado reflejaba muy bien lo propuesto.