Promedia la cursada y algunas ideas y conceptos que estaban en filigrana al comienzo, empiezan a delinearse con toda su contundencia. Pero para avanzar en la devolución que les estamos solicitando como prototipo/instalación/intervención, debemos aclarar cuál ha sido nuestro desafío inicial.
Todo partió de la elección de una serie de HBO perteneciente a la actual saga de la televisión de calidad. Si bien cada pasada de Westworld nos fascina mas, aceptamos cuestionamientos (que pueden ser como los suyos) como los de Concepción Cascajosa Virino, autora de la crucial “La cultura de las series” cuando insiste en ¿Se puede decir algo nuevo de ‘Westworld’?, que “es más entretenido leer sobre Westworld que verla”.
Como quiera que sea renovamos nuestro pacto de lectura con la cursada ya que siempre la imaginamos como….
Solo que en nuestra caso de lo que se trataba no era de promocionar el diálogo entre Vito Corleone y Johnny Fontane, sino de hacerle eco a otro ícono de las series como fue la saga de Star Trek, que comenzaba cada episodio relatando desde la bitácora del capitán «Espacio: la última frontera. Estos son los viajes de la nave espacial Enterprise. Su misión de cinco años: explorar un mundo nuevo y extraño, buscar nueva vida y nuevas civilizaciones, ir audazmente a donde ningún hombre haya ido antes«.
Si bien hay muchos hilos conductores de la cursada, el mas básico, instintivo y de mayor alcance remite a una de las frases pronunciadas por el Gran Gregory Bateson (1904-1980) Polígrafo acerca de la poliocularidad y lo indispensable que son las múltiples interpretaciones para abrazar mínimamente los fenómenos contradictorios y sobredeterminados que nos toca vivir a diario.
Porque solo con aportes provenientes de territorios muy variados, desde lecturas ortogonales y a veces contradictorias, con un aparato conceptual multinivélico, es posible aprehender los hiperobjetos que forman parte de la problemática de la cátedra.
Timothy Morton acuñó el término hiperobjeto para referirse a las cosas que se distribuyen masivamente en tiempo y espacio en relación con los humanos. Un agujero negro, un campo petrolero, la biosfera o el sistema solar, todos los materiales nucleares de la Tierra… son hiperobjetos.
Un hiperobjeto podría ser un producto de manufactura humana de larga duración, como el poliestireno, o también la suma de toda la maquinaria chirriante del capitalismo. Los hiperobjetos son “hiper” en relación con alguna otra entidad, más allá de que esté producida o no por los seres humanos.
Tienen muchas características en común: son viscosos, “no-locales”, involucran una temporalidad radicalmente distinta de las temporalidades a escala humana a las que estamos acostumbrados. Ocupan una fase espacial de alta dimensionalidad que los vuelve invisibles a los humanos durante ciertos períodos de tiempo.
Los hiperobjetos ya han tenido un impacto significativo en el espacio humano psíquico y social. Son directamente responsables de lo que Morton llama “El fin del mundo”, volviendo obsoletas tanto la mirada apocalíptica sobre la crisis ambiental, como su negación. Los hiperobjetos ya han inaugurado una nueva fase humana de hipocresía, debilidad e inconsistencia. De eso trata esta cursada
1. Default ambiental y default epistemólogico
Como hemos visto a lo largo de enero y febrero, el coronavirus ha inspirado gran parte de nuestras preocupaciones acerca de la fenomenología del presente. Que una epidemia de estas características haya ocurrido en China no por previsible (recordemos al SARS de 2003) es menos llamativa para nosotros, por cuanto cada día estamos mas convencidos de que el futuro es asiático (aunque una minoría discrepe Long-awaited ‘Asian century’ might not ever come).
Todo en Asia es excepcional, empezando por China con sus 113 ciudades que tienen mas de 1 millón de habitantes cada una, su crecimiento imparable entre 1983 y 2007 (entre el 10% y el 15% anual), con la mitad de la población mundial en sus fronteras, y con una reconexión con su hegemonía de muchos siglos perdió solo hace menos de 200 años con la guerra del opio
Casi nada de esto lo sabemos o lo analizamos en las facultades de ciencias sociales -y menos en las carreras de comunicación. Algo está fallando en nuestra formación y en nuestra curricula.
En su columna semanal Default ambiental: ¿Los economistas corren de muy atrás al cambio climático?, Sebastián Campanario alude al default ambiental entendido como la ignorancia de la profesión por las tribulaciones del cambio tecnologico que están poniendo al planeta en riesgo de extinción.
La economía tiene una tradición en «llegar tarde» a muchas de las megatendencias que se desplegaron en los últimos años. Pasó con la disrupción tecnológica, la inteligencia artificial y el debate de género: los tiempos académicos son más lentos que estas olas de cambio, y la disciplina tiende a quedar en offside.
La noción de default ambiental nos parece fascinante, y se suma a cuestiones mas generales acerca de la ineficiencia de la prediccion de los expertos, el narcisismo y la endogamia de las investigaciones en las ciencias sociales (pero también en las ciencias duras), y los riesgos que supone anteponer el libre albedrío investigativo ante los infinitos problemas de fondo que debemos resolver, y que son dejados de lados por las bellas mentes que pueblan los Consejos de Investigaciones y las Universidades de elite y no tanto.
Pero creemos que debemos generalizar la idea de default, sacarla del terreno específico de una miopía economicista ante el cambio climático y generalizarla a la mayoría de la investigaciones en curso, cada vez mas trabadas no solo por los motivos anteriores, sino por una ceguera epistemológica espeluznante.
Hablando de temas conexos Daniel Innerarity el filosofo vasco en “La democracia se ha quedado desfasada casi en todo” una entrevista que le hicieron esta semana pone las cosas en su justo punto: “La reflexión política no ha pasado por Einstein, Heisenberg, las neurociencias, la teoría de la emergencia, las causalidades no lineales. Estamos pensando todavía la política en un universo newtoniano«.
Entre las limitaciones a las que nos ha llevado este default está no solo nuestra dificultad para diferenciar las señales del ruido (titulo de una bella obra de Nate Silver The Signal and the Noise: Why So Many Predictions Fail-But Some Don’t sino nuestra incapacidad para caracterizar fenómenos de relevancia máxima pero que desconocemos o pasamos por alto urgidos como estamos por cuestiones mas perentorias y terrenales. Y la IA es uno de ellos.
2. ¿Qué es ser humano?
Para los propósitos de esta cursada la pegunta recurrente es por lo que especifica nuestra humanidad.
Las características funcionales no son muy interesantes como respuestas. Podemos armar listados interminables como estos
- Los organismos vivos responden a su entorno.
- Los organismos crecen y cambian.
- Los seres vivos se reproducen y tienen descendencia
- Los organismos transmiten rasgos a su descendencia.
- Tienen una química compleja.
- Los organismos están compuestos de células.
y aun así no avanzaremos mucho en nuestra caracterización. Para desanclarnos de las definiciones funcionales en el teórico anterior introdujimos los interesantes aportes de Francisco Varela & Humberto Maturana y su teoría de la autopoiesis que pronto cumplirá 50 años.
Según Maturana y Varela, son autopoiéticos los sistemas que presentan una red de procesos u operaciones (que los definen como tales y los hacen distinguibles de los demás sistemas), y que pueden crear o destruir elementos del mismo sistema, como respuesta a las perturbaciones del medio.
Aunque el sistema cambie estructuralmente, dicha red permanece invariante durante toda su existencia, manteniendo su identidad. Los seres vivos son en particular sistemas autopoiéticos moleculares, y que están vivos solo mientras están en autopoiesis.
Si esa definición nos fascina y venimos siguiéndole el paso desde que nos topamos con la primera versión de De máquinas y seres vivos en Santiago en 1973, no menos interesante (para los fines de la cursada de Westworld) es la ventaja que tiene de poder proporcionar ciertos criterios de validación para sostener que nos encontramos frente a un sistema autopoietico, y que se pueden resumir en tres:
1. Borde semipermeable: Verifique que el sistema se define por un límite o borde semipermeable constituido por componentes moleculares que permite discriminar entre el interior y el exterior del sistema en relación con los componentes relevantes del sistema. Si es así, proceda con el criterio
2. Red de reacciones: Verifique que los componentes de la barrera son producto de una red de reacciones que opera al interior de la barrera. Si la respuesta es afirmativa, proceda con el criterio 3.
3. Interdependencia: Verifique que la red de reacciones es regenerada por condiciones producidas por la existencia de la misma barrera, es decir, que 1 y 2 son interdependientes. Si es así, el sistema es autopoietico.
¿Aplica esta noción a los androides? ¿Podemos diseñar sistemas autónomos vivos y conscientes? Lo exploraremos en otra oportunidad pero no obviemos este interesante señalamiento que hace Patricia Trapero Llobera en la antología de Irwin Westwood y la Filosofia
No se puede pasar por alto que hay es una relación entre el espectáculo y las teorías de los representantes de la primera y segunda oládas cibernéticas, principalmente Foerster, Maturana y Varela, que centrarán sus debates en la posibilidad de construir una máquina consciente.
A esta altura de la cuesada hemos pasado de distinciones generales a consideraciones más específicas. No solo revisamos muchos condimentos de la saga sino que también investigamos en detalles personajes, los replicamos en clases de prácticos, armamos nuevas tramas narrativas y permanentemente estamos aludiendo a las dimensiones narratológicas y escatológicas de la serie.
Siempre nos habia llamado la atención el singular titulo el capitulo de cierre de la primera temporada “The Bicameral Mind” y por eso iniciamos en el Teórico 5 algunas referencias a la obra de Julian Jaynes que profundizaremos aquí.
3. La mente bicameral y los orígenes de la conciencia
El Dr. Robert Ford (Anthony Hopkins) y Bernard Lowe (Jeffrey Wright) discuten la conciencia y la teoría de la mente bicameral de Julian Jaynes en wl Ep. 1.3 de la primera temporada de Westworld en un diálogo que enuncia por primera vez la teoria bicameral de la conciencia y que transcribimos a continuación:
- “Nuestros anfitriones comenzaron a pasar la prueba de Turing después del primer año. Pero eso no fue suficiente para Arnold. No estaba interesado en la apariencia de intelecto o ingenio. Quería lo real. Quería crear conciencia. «Lo imaginó como una pirámide. ¿Ves? Memoria, improvisación, interés propio …
-“ ¿Y en la cima? «
-“ Nunca llegué allí. Pero tenía una idea de lo que podría ser. Lo basó en una teoría de la conciencia llamada «mente bicameral». «
-“ La idea de que el hombre primitivo creía que sus pensamientos eran la voz de los dioses … ¿Pensé que estaba desacreditada? «
Para aclarar, como sucedió en un chat de trasnoche que tuvimos en el backstage de la cátedra, la teoría de Jaynes no ha sido «desacreditada». Por el contrario, una gran cantidad de nueva evidencia ahora respalda esta fascinante teoría sino como teoría de la conciencia quizás si como modelo de una conciencia de diseño.
«Como una teoría para entender al ser humano mente, tal vez, pero no como un plan para construir uno artificial. Mira, Arnold construyó una versión de su cognición en la cual los anfitriones escuchaban su programación como un monólogo interno, con la esperanza de que con el tiempo, su propia voz se haría cargo. Era una forma de arrancar la conciencia. «Pero Arnold no había considerado dos cosas. Una, que en este lugar, lo último que quieres es que los anfitriones sean conscientes, y dos, el otro grupo que consideraba sus pensamientos como las voces de los dioses …»
Aunque no pudimos explorarlo en detalle hay una importante conexión entre nuestra definición de ser vivo y la de ser humano como ser consciente (en el lenguaje). Aportes como los de Koch van en esa dirección.
Para Koch en The Feeling of Life Itself: Why Consciousness Is Widespread but Can’t Be Computed (2019) la teoría explica muchos hechos sobre la neurología de la conciencia y cómo se ha utilizado para construir un medidor de conciencia clínicamente útil. La teoría predice que muchos, y quizás todos, los animales experimentan las imágenes y los sonidos de la vida; la conciencia está mucho más extendida de lo que se supone convencionalmente. Contrariamente a la sabiduría recibida, sin embargo, Koch argumenta que las computadoras programables no tendrán conciencia. Incluso un modelo de software perfecto del cerebro no es consciente. Su simulación es conciencia falsa. La conciencia no es un tipo especial de cálculo, no es un truco inteligente. La conciencia maquinal es una falsa conciencia.
Mientras Gazzaniga en The Consciousness Instinct: Unraveling the Mystery of How the Brain Makes the Mind (2019) insiste en que el cerebro es en realidad una confederación de módulos independientes que trabajan juntos. Comprender cómo la conciencia podría emanar de tal organización ayudará a definir el futuro de la ciencia del cerebro y la inteligencia artificial, y cerrará la brecha entre el cerebro y la mente.
Aquí tenemos la version de la mente bicameral en la propia voz de Julian Jaynes
Consciousness and the Voices of the Mind
Resumiendo nuevamente sus tesis conviene recordar.
La definición de conciencia de «Jaynes» es sinónimo de lo que los filósofos llaman «metaconciencia» es decir, conciencia de la conciencia, pensamientos sobre el pensamiento, deseos sobre los deseos, creencias sobre las creencias. Esta forma de reflexión también es distinta de los tipos de «deliberaciones» que se ven en otros animales superiores, como los cuervos (como la adjunta mostró®esa en le teórico 8), en la medida en que depende de la cognición lingüística.
Jaynes escribió que los humanos antiguos antes de aproximadamente 1000 a. C. no eran reflexivamente metaconscientes y operaban por medio de esquemas de hábitos automáticos y no conscientes. En lugar de tener metaconciencia, estos humanos estaban constituidos por lo que Jaynes llama la «mente bicameral».
Para los humanos bicamerales, cuando el hábito no era suficiente para manejar nuevos estímulos y el estrés aumentaba en el momento de la decisión, la actividad neuronal en el hemisferio «dominante» (izquierdo) se modulaba por alucinaciones verbales auditivas que se originaban en el llamado hemisferio «silencioso” derecho (particularmente la corteza temporal derecha), que se escuchaba como la voz de un jefe o dios e inmediatamente era obedecida”.
Jaynes creyó que la evolución del lenguaje es lo que creó nuestra metaconciencia. A medida que los humanos comenzaron a vivir en grupos cada vez más grandes, el lenguaje se volvió cada vez más importante.
Una vez que tenemos lenguaje, tenemos palabras que representan cosas. Las personas ahora podrían pensar en cosas que no estaban en su realidad inmediata. Esto crea el reino de la imaginación, y también el concepto de tiempo (pasado y futuro). Y esto conduce gradualmente a la metaconciencia que tenemos hoy (sintesis de The Bicameral Mind Theory by Julian Jaynes).
La conciencia para Jaynes significaba «lo que es introspectable». Aquellos de nuestro pasado no tan lejano que tenían una mente bicameral no podían introspectar, por lo tanto, no estaban conscientes. Jaynes utiliza la épica Iliada de Homero como un ejemplo en el que los personajes nunca parecen tener pensamientos internos en la forma en que los percibimos hoy. Parecen mucho más como autómatas.
A medida que vamos viendo la serie comprobamos una identificación creciente nuestra con los anfitriones y un rechazo equivalente a los visitantes pero sobretodo ala corporación que armó no solo un parque de diversiones para regodear al Ello (Id), sino también como una forma (ver segunda temporada) de volvernos inmortales.
¿Hasta qué punto los anfitriones usufructuúan de una mente bicameral como ventaja o desventaja? ¿Estamos volviendo a una conciencia pre-homérica como muchas veces anticipó McLuhan en sus escritos? ¿Será Weestworld uno de los primeros ejemplos de cómo se piensa (o se rechaza) lo humano una vez que ponemos a Gutenberg entre paréntesis?
4. ¿La inteligencia artificial puede crear belleza?
Si la racionalidad no define nuestra humanidad. Si las emociones se pueden sintetizar y ya conocemos varios casos de humanos enamorados de personas no-humanas (animales, seres virtuales, máquinas de placer, robots, etc) ¿se están cayendo los muros que nos separan de la otredad?
En esta búsqueda de alimento para la tesis de la cuarta discontinuidad de Bruce Mazlisch en para quien en La cuarta discontinuidad la coevolucion de hombres y maquinas (1993) el ego humano está experimentando un cuarto shock, semejante a los causados par Copérnico, Darwin y Freud. Ahora estamos empezando a darnos cuenta de que los humanos no ocupamos una posición tan privilegiada a las máquinas como irreflexivamente habíamos supuesto.
¿Y si en vez de buscar la humanidad en la conciencia, en los sentimientos, en la sociabilidad (que aunque lejos de lograrse hoy, parecen acercarse en en el futuro, aunque la charla de Mariano Amartino fue muy critica de esta posibilidad) buscáramos esa continuidad en el arte.
Estamos crecientemente en un mundo en el que las máquinas producen nuevas audaces obras de arte y música, escriben historias, cuentan chistes o funcionan como el cerebro que opera un robot. Por ello preguntas como estas están a la orden del día.
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Son algunas de las que se hace Arthur I Miller en The Artist in the Machine: The World of AI-Powered Creativity ¿Alguna vez las computadoras pensarán como nosotros? ¿Podrían alguna vez tener destellos de inspiración o tener ideas locas? ¿Podrían inventar algo en lo que nadie había pensado antes y nunca pensó que era necesario?
¿Podrían soñar las obras de Shakespeare? ¿Pero necesitan hacerlo? Tal vez funcionen de otras maneras, propongan ideas igual de geniales o soluciones igual de efectivas pero diferentes de las que se nos ocurrirían a nosotros, meros humanos. ¿Cuál es la vida mental de las máquinas? ¿Pueden las máquinas ser creativas? ¿Pueden las máquinas tener conciencia? ¿Y a qué nos referimos cuando hablamos de ser creativos? ¿Vamos a tener que repensar lo que entendemos por pensar y lo que entendemos por creatividad? Por suerte el libro tiene su sitio web y allí podemos ver ejemplos asombrosos.
Para nosotros uno de los mas llamativos han sido los que genero Deep Dream de Mike Tyka.
DeepDream es un programa de visión por computadora creado por el ingeniero de Google Alexander Mordvintsev que utiliza una red neuronal convolucional para encontrar y mejorar patrones en imágenes a través de pareidolia algorítmica, creando así una apariencia alucinógena de ensueño en las imágenes deliberadamente sobreprocesadas
El informático / artista Mike Tyka quería encontrar una manera de mejorar las imágenes creadas por DeepDream. La idea crítica se le ocurrió a las 2 de la madrugada. Se concentró en un segmento de la imagen que la máquina había generado, luego la amplió, amplió y alejó, recortando intermitentemente la imagen, revelando estructuras dentro de estructuras hasta que comenzaron a aparecer cualidades fractales.
Pronto veríamos un conglomerado de animales, reptiles, lagartos, automóviles, bicicletas que se extienden hasta el infinito, «todo el camino». El extraordinario video en constante cambio de Tyka nos deja hechizados. Ver, en particular, el segmento 3:10 a 3:55.
Las computadoras pueden imaginar pueden crear, pueden programarse (o autoprogramarse) para inventar en estados psicodélicos (otra precondición de humanidad) ver Andrew Smart Beyond Zero and One Machines, Psychedelics, and Consciousness .
Pero en materia de 4ta discontinuidad, cuando creemos llegar al final del camino solo estamos en el principio. Los próximos teóricos nos explicaran como y porque. Tal vez. O tal vez no.
Referencias
Brinson, Sam The Bicameral Mind and Our Constant Inner Monologue. Medium Jan 3/2017
Khana, Parag The future is Asian. Simon and Schuster, 2019.
Andrew Oswald y Nicholas Stern «Why does the economics of climate change matter so much, and why has the engagement of economists been so weak?» September 2019 PR Policy Portal
Fernandez Slezak, Diego y otros A quantitative philology of introspection
Front. Integr. Neurosci., 24 September 2012
Morton, Timothy Hiperobjetos. Filosofía y ecología después del fin del mundo. Adriana Hidalgo, 2018.
Trapero-Llobera, Patricia ‘The Observer(s) System and the Semiotics of Virtuality in Westworld’s Characters Jonathan Nolan’s Fictions as a Conceptual Unity” en Irwin (ed) Westworld and philosophy. If You Go Looking for the Truth, Get the Whole Thing 2018.
CAPITULO 10 LA MENTE BICAMERAL Sintesis
El Hombre de Negro presiona a Dolores sobre el paradero de Wyatt y el centro del laberinto, y revela que en realidad es el anciano William. Dolores entonces recuerda la orden de Arnold de matarlo y destruir el parque, y que ella es realmente Wyatt. Ella intenta contraatacar, Teddy la rescata, y huyen a una playa distante. Dolores muere en los brazos de Teddy, aunque eso se revela como parte de la narrativa de Ford. Durante su huida de Westworld, Maeve, ayudada por Hector y Armistice, encuentra el cadáver de Bernard y Félix lo repara. Bernard advierte a Maeve que su deseo de escapar estaba programado en ella. Aunque Maeve, ahora sola, inicialmente continúa su fuga, tiene dudas y sale del tren que sale de manera inminente para encontrar a su hija. Le dieron una hoja sobre el paradero de su hija, revelando la existencia de múltiples parques, incluido Shogun World, que se mostró anteriormente. De vuelta en Westworld, Ford les dice a Dolores y Bernard que lamentó su papel en la muerte de Arnold, que también deseaba liberar a los anfitriones y que ha pasado los últimos 35 años preparándolos para contraatacar. Luego da un discurso frente a Charlotte, el Hombre de Negro y otros huéspedes, criticando su manejo del parque. Dolores luego dispara y mata a Ford. Un ejército de anfitriones reactivados emerge de un bosque cercano y Dolores comienza a disparar a los huéspedes
Mejores escenas capítulo 10
1.46/3.09 I’am in a dream
7.59/11.22 You are alive
15.21/16.16 More than real
19.05/20.03 Maeve
20.25/21.30 Rise to the top
36.11/40.17 William
45.40/47.30 Bernard/Maeve
48.24/49.19 Laberinto no es para vos
49.28/50.59 Alguien alteró tu trama **
53.36/54.20 Belleza
1.04.50/1.07.20 Dolores
1.11.21/1.12.31 God are us
Videos ligados a la teoría de la conciencia de Jaynes
Dr. Stefan Schizadler Lecture: A Re-awakening of the Bicameral Mind
The Bicameral Mind | Kitty Johnson | TEDxTuscaloosa
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