Por Pamela Martinez, Hernan Papalovi, Florencia Diaz Roznickas, Graciela Zurita

Desde principios del siglo pasado los hechos periodísticos se han ido ganando un lugar en nuestras vidas. Primero desde un lugar periférico, con noticias descriptivas, hasta encontrarnos hoy en día invadidos en nuestra intimidad por información prediseñada a medida por algoritmos lógicos que develan y promueven nuestras coincidencias, postulando verdades esotéricas, tanto que hasta se han vuelto incomprobables gran parte de ellas.

Si consideramos que en el 2017 solamente Facebook tenía más de 2.000 millones de usuarios mensuales (500 millones de personas más que la población de China), los cuales eran expuestos a todo tipo de noticias diagramadas por “bots”, ¿cómo es posible resguardar la veracidad como norma indisoluble de la información?

Estas preguntas nos generan una reflexión hipotética marcada: las “Fake News” han contribuido a reafirmar la veracidad de la información, y por otro lado, la facilidad y rapidez para informarnos masivamente ha sido el boomerang para desinformarnos individualmente.

Des-cajanegrizando las noticias verdaderamente falsas

Reconstruir las ideas de antaño en los tiempos que transcurren es impensado. Cada época conlleva valores y características propias de ella, así podemos distinguir objetos de estudio propios de cada momento histórico, produciéndose rupturas estimuladas por la propia era del pensamiento. Las noticias falsas no son propias de este bienio, ni de este lustro y menos de esta última década. Recordar casos como los ocurridos con periodistas como Janet Cooke, Stephen Glass o Jayson Blair quienes, trabajando para periódicos de renombre mundial como “The Washington Post”, “The New Republic” y “The New York Times” respectivamente, inventaron historias y falsearon información con el fin de captar lectores y catapultar sus carreras profesionales, nos dan una muestra de que este fenómeno de las “Fake News” no es contemporáneo solo a este momento. Pero entonces, ¿qué características fuerzan que lo sea y por qué hoy más que nunca se habla de este tema?

Transcurriendo la “escalera hermenáutica” propuesta por el filosofo alemán Hans-Georg Gadamer, la cual nos lleva a la era de la posverdad, encontramos en el camino dos diferenciaciaciones fundamentales para nuestro tema, la primera, cómo se informan los individuos hoy en día, y la segunda, que les interesa informar a los grandes monopolios económicos mediáticos.

Partiendo de el concepto de “actantes” del filosofo Bruno Latour, hoy en día las redes permiten generar publicaciones constantes sin impedimento alguno, los generadores de noticias (el término periodistas queda exageradamente precario) han quedado subordinados en muchos casos ha “bots” o “trolls” interesados en declinar el intereses social hacia lugares medidamente estipulados (como el comediante Paul Horner, en las últimas elecciones de EEUU que llevaron a Donald Trump a la presidencia). Internet ha desafiado particularidades ridículas, volviéndolas virales verborrágicamente. Es aquí donde debemos hacer un alto y reflexionar el modo en que ha crecido la demanda de noticias, exigiendo vertiginosamente a los periodistas inmediatez, omnipresencia, simpleza y emotividad. Los títulos se han vuelto la noticia, llegando a un acuerdo tácito entre actores y actantes, desplazando valores indisociables como veracidad, ética y certeza, pilares de las noticias de otros tiempos.

Para resaltar queda el manejo de opinión pública que la información provoca, siendo la característica inalienable de la desinformación que invade la web. Esto genera realmente un problema, ya que lejos de solamente buscar un beneficio
particular para el actante, intenta enquistar raíces tendenciosas en el pensamiento individual de los actores, generando una voluntad general.

¿Cómo batallar la desinformación en la era de la Posverdad?

En el mes de abril del año 2017, la revista Times titulaba “¿A muerto la verdad?”. A partir de la elección del presidente EEUU Donald Trump, y el cuestionamiento expuesto en las redes de su campaña presidencial, es que medios como
Facebook han tenido que considerar de qué forma advertir y censurar las llamadas “Fake News”.

Tomando la opulencia de los números de Facebook, que desde su nacimiento en 2004, se han hecho más de 2.500.000.000.000 publicaciones, nos gustaría desarrollar como estas Empresas comienzan a combatir la desinformación, que más allá de rendirse ante sorprendentes números publicados por We Are Social y
Hootsuite, se inquietan por perder credibilidad y como resultado no generar nuevos usuarios.

Consciente de que gran parte de la población mundial se informa por medio de la aplicación, Mark Zuckerberg (creador de Facebook), y cansado de los bulos, ha decidido promover un manual con consejos para que sus usuarios aprendan a
identificar noticias falsas. Los objetivos de Facebook son tres: terminar con los incentivos económicos, ya que para nadie es un secreto que la mayoría de noticias falsas son pagadas con algún interés, político, social o comercial. El
segundo objetivo es mejorar la diversidad de la información, importando noticias de medios confiables y reconocidos, pero también, reportando y marcando las noticias que son falsas. Finalmente, con lo anterior, ayudar a que las personas
tomen mejoras decisiones con información veraz, como en el caso de elecciones presidenciales.

Por otro lado y como paliativo a las “Fakes News” desarrolladas en la red, estudiantes de la Universidad de Indiana (EEUU) han creado, en 2016, una plataforma llamada “HOAXY”, la cual se encarga de la detección de rumores y
teorías de la conspiración en la red. En el buscador es posible introducir un tema y mediante unos rastreadores web el servicio ofrece una lista con los enlaces a la información falsa publicada sobre ese asunto. Hoaxy, que solo existe por el
momento en su versión preliminar (beta), rastrea contenidos en un total de 132 páginas marcadas por difundir informaciones falsas. Una vez detectadas, la Interfaz de Programación de Aplicaciones (API) analiza la forma en la que se propagan estas noticias por las redes y ofrece también la posibilidad de consultar en gráficos el impacto de estos contenidos, cuándo y cuántas veces ha sido compartido, así como los medios de difusión.

A su vez, la UE está creando un grupo de expertos para combatir, por medio de la reflexión y el cuestionamiento, las “Fakes News”. Este grupo cuenta con más de cuarenta representantes en las redes sociales y medios de comunicación,
dedicados a desmontar “bulos”.

Conclusión

El Foro Económico Mundial, entre otras instituciones, considera que la desinformación digital se sitúa entre los principales riesgos futuros a nivel mundial. Realmente este tema ha comenzado a circular muy fuertemente como centro de debates institucionales y gubernamentales, logrando un espacio reflexivo que por lo investigado, tiene una posible solución en la misma configuración del problema algorítmico, como un circulo de “bots” y detectores informáticos creados por el mismo vientre.

Bibliografía

Blair, Jayson (2006): Burning Down My Master’s House: A Personal Descent Into Madness That Shook the New York Times. Phoenix Books. Phoenix.
Goodwin, H. Eugene (1987): En búsqueda de una ética en el periodismo. Gernika. México.
Suárez, Juan Carlos (2009): La crisis de identidad del periodista y la ética profesional. Publicado en Estudios Sobre el Mensaje Periodístico. Núm. 15.
Lipovetsky, Guilles (1986): La era del vacío. Ensayo sobre el individualismo contemporáneo. Ed. Anagrama.
Lazer, David (2015): El surgimiento del algoritmo social. La curaduría de contenido por Facebook introduce una inclinación ideológica. En Science magazine.
Latour, Bruno (1999): “¿Cree usted en la realidad?” y “La referencia circulante”, en La esperanza de
Pandora. Ensayo sobre la realidad de los estudios sobre ciencia. Gedisa, Barcelona.

Links

http://es.ccm.net/news/20826-hoaxy- el-detector- de-noticias- falsas
http://www.nos-comunicamos.com.ar/node/6857
http://www.semana.com/tecnologia/articulo/facebook-lanza- herramienta-para- detectar-noticias-falsas/521389
https://www.bigbangnews.com/tecnologia/Facebook-quiere- un-detector- de-noticias- falsas-pero- se-le-adelantaron-20161120- 0003.html
http://www.elportal.com.do/facebook-trabaja- detector-noticias- falsas-clasificar- la-desinformacion/

Hoaxy: A Platform for Tracking Online Misinformation

https://elpais.com/tecnologia/2016/12/23/actualidad/1482488916_551462.html

https://wwwhatsnew.com/2016/12/23/hoaxy-un- buscador-que- ayuda-a- encontrar-y- detectar-noticias-falsas/
https://www.stopfake.org/es/las-mejores- herramientas-del- navegador-para- el-analisis- de-los- fakes/
http://thinktankmedia.mx/detector-de- noticias-falsas/
http://www.chequeado.com/investigacion/el-mundo- secreto-de- los-bots- y-los- trolls-y- como-esos-ejercitos-influyen- en-la- politica/
https://elpais.com/tecnologia/2016/11/21/actualidad/1479713764_135804.html
https://elpais.com/tecnologia/2016/11/21/actualidad/1479713764_135804.html