¿Cómo hacemos planes para el futuro en una era de shocks aparentemente interminables? ¿Cómo podemos sentirnos seguros cuando nos preparamos constantemente para el próximo evento “inimaginable” o cambio “impensable”?
En los últimos años nos encontramos inmersos en un mundo hiperconectado en constante cambio (tanto natural como artificial). Interactuamos y descubrimos nuestro mundo a través de tecnologías que nos permiten comprender así como rediseñar o transformar determinado campo de conocimiento o desarrollo/innovación. Nos encontramos sujetos a una forma de observar y comprender nuestro entorno que cuando sucede un acontecimiento impensado (una crisis o evento climático, una enfermedad pandémica, una guerra/invasión, una falla en una central nuclear, etc ), nuestra forma de convivir y actuar cambia prácticamente de la noche a la mañana.
El 20 de abril de 2010 se produjo la explosión y hundimiento de la plataforma petrolífera (plataforma de perforación semisumergible de aguas ultraprofundas) “Deepwater Horizon”, operada por British Petroleum (BP). Durante 87 días, desde el pozo Macondo, situado a 1.500 metros de profundidad, fluyeron 4.900 millones de barriles de petróleo, que contaminaron los humedales del Delta del Misisipi y las costas de Luisiana, Misisipi, Alabama y Florida, según datos de la Agencia estadounidense de Protección Ambiental.
El derrame de petróleo ocurrió después de que una oleada de gas natural atravesara un núcleo de concreto instalado para sellar un pozo de petróleo para su uso posterior. Una vez liberado, el gas natural subió por un elevador hasta la plataforma de la plataforma petrolera que estaba sobre el pozo, donde se encendió, matando a 11 trabajadores e hiriendo a 17. La plataforma volcó y se hundió en la mañana del 22 de abril, rompiendo el elevador, a través de cuyo lodo de perforación había sido inyectado para contrarrestar la presión ascendente del petróleo y el gas natural. Sin ninguna fuerza de oposición , el petróleo comenzó a descargarse en el golfo.
Las perspectivas económicas en los estados de la Costa del Golfo fueron muy malas; el derrame afectó a muchas de las industrias de las que dependían sus residentes. Por otro lado, más de un tercio de las aguas federales en el golfo se cerraron a la pesca en el pico del derrame por temor a la contaminación.
La explosión del pozo Macondo es el peor derrame de petróleo en alta mar de la historia. Los costos de reclamos, acuerdos y limpieza han aumentado a más de $ 42 mil millones.
Es así que luego de analizar este caso, observamos como la empresa British Petroleum ( una de las corporaciones multinacionales productoras de gas y petróleo más grandes del mundo) elabora y explora escenarios a futuro vinculados al proceso de transición energética.
Compartimos el análisis desarrollado en clase
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