Nuestras entradas en este sitio (como en los últimos Teóricos presenciales) siempre remiten a un tono musical. Charly García es una referencia siempre para dimensionar la complejidad de una época en donde la asimitría, la «desprolijidad», el caos, los errores (?) , la instantaneidad como el vocabulario auditivo sirven para caracterizar nuestro mundo. Charly se constituye en un n gran traductor de nuestro paisaje contemporáneo.
Como en Clics Modernos que señalábamos en otro espacio, el proceso de transición democrática que marco 1983, nos trajo canciones alegres como esta de los Abuelos de la Nada: Asi es el calor (del famoso «disco» Vasos y Besos).
En esta oportunidad, deseamos trabajar los aspectos metodológicos en las propuestas de intervención referidas a los procesos de mitigación de cambio climático. El encuadre lo dará un Proyecto de Ciudades Latinoamericanas que toma referencia lo presentado por la Agenda en Cambio Climático y Ciudades de CAF – Banco de Desarrollo de América Latina. Como señalamos anteriormente su objetivo se centra en generar información pública que apoye a los Gobiernos municipales y tomadores de decisión de la región en el desarrollo e implementación de estrategias de mitigación y adaptación al cambio climático, mediante el uso de herramientas e indicadores como la Huella de Carbono y la Huella Hídrica.
Como venimos señalando, el cambio climático es una amenaza para el bienestar humano y la salud del planeta. Los impactos se magnifican en las ciudades donde vive más de la mitad de la población mundial. Por ese motivo nuestro foco en los espacios en donde se concentran al mismo tiempo riqueza y pobreza, donde tienen lugar actividades comerciales, industriales y recreacionales.
La gran demanda de recursos que ella ocasiona , genera alrededor del 50-70 % de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) globales. Muchas ciudades son vulnerables a los efectos climáticos adversos, cada vez más frecuentes y de mayor magnitud.
Con un 40 % de su población viviendo en ciudades en 1950, pasó a más del 80 % en la actualidad, y se espera que alcance 90 % a mitad del siglo. La gran velocidad de la urbanización y la carencia de procesos de planificación y gestión territorial adecuados en América Latina y el Caribe (LAC) ha tenido un alto costo social, económico y ambiental. Muchas de las ciudades han experimentado una transformación urbana traumática y, a veces, violenta por su celeridad, marcada por el deterioro del entorno. Hoy en día, experimentan también una profunda desigualdad social. De hecho, las ciudades de esta región son consideradas las más inequitativas del planeta (ONU-Hábitat, 2012).
Es claro que para lograr las metas de desarrollo globales de un mundo urbanizado –establecidas en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (especialmente el ODS 11: “Ciudades y comunidades sostenibles”), el Acuerdo de París (ODS 13: Acción por el clima), los Compromisos Nacionales Determinados (NDC) del Acuerdo de París y la Nueva Agenda Urbana planteada para la tercera Conferencia de las Naciones Unidas sobre Vivienda y Desarrollo Urbano Sostenible (Hábitat III)– son de alta relevancia y resultan clave las acciones que se asuman desde el ámbito local, especialmente en América Latina.
Según el último informe BP Statistical Review of World Energy, en conjunto, Brasil y México fueron responsables en 2018 del 2.7% de las emanaciones de CO2 a nivel mundial, con un total de 905 millones de toneladas. A pesar de emitir una menor contaminación en comparación con estas dos potencias regionales, tanto Colombia como Perú han doblado la cantidad de CO2 emitida en el aire en los últimos diez años.
Como señalamos, el principal objetivo del “Proyecto Huella de Ciudades” es apoyar a los Gobiernos municipales y tomadores de decisión en el desarrollo e implementación de estrategias municipales de mitigación y adaptación al cambio climático, a través del cálculo de la huella de carbono (HC) y la huella hídrica (HH) de sus ciudades (como territorios) y de sus propias instituciones (como organizaciones y los servicios públicos que brindan a la población), la elaboración de portafolios de proyectos de inversión orientados a la reducción de las huellas (planes de acción), la implementación de acciones piloto con potencial de escalamiento, y el involucramiento de los actores relevantes de la sociedad en busca de sinergias para abordar el problema de forma colectiva.
Compartimos los slides trabajados en clase referido a este Proyecto
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